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Alguien que anda por aquí

Estos novios de usar y tirar

Siempre queremos lo que no tenemos, siempre queremos otra cosa. A mí que tengo el pelo liso, me encanta que se me rice cuando viajo a una ciudad de clima húmedo.

Tenemos un móvil que funciona bien pero queremos uno más moderno que tenga más funciones aunque no vayamos a utilizar ni la mitad de ellas. Se nos estropea el DVD y ni siquiera nos molestamos en ver si se ha cumplido la garantía para llevarlo a reparar, nos compramos uno nuevo y mejor, aprovechamos que ya teníamos ganas de cambiarlo.

Es esta sociedad de consumo que nos empuja a tener cada vez más coas, cada vez más nuevas. También porque ahora las cosas no se hacen para que duren, es más barato comprarlas nuevas que repararlas, y sobre todo es más rentable para el mercado crear cada poco tiempo una necesidad nueva, inventar una moda nueva que haga inservible la anterior.

Todos, en mayor o menor medida, aunque queramos escaparnos, nos dejamos llevar por esta sociedad de consumo, por el ansia de lo nuevo, por la costumbre o la moda del usar y tirar: algo mejor vendrá o ya ha venido y yo aún no lo tengo.

A la vista de lo que sucede a mi alrededor, parece que eso mismo pasa con las relaciones. Ya no nos esforzamos por mantenerlas, por cuidarlas, por arreglarlas cuando se estropean, cuando surge un problema entre los dos. Esto falla, ya no me sirve, algo mejor vendrá.

Como si una pareja lo fuera solo para los buenos momentos, cuando precisamente si tienes una pareja es porque has decidido compartir con ella tu vida, que no será siempre de color de rosa. Y es en esos momentos cuando la pareja tiene que ayudarte a ver la vida de otro modo, con su apoyo explícito o con su silencio, acompañándote y no huyendo ante la primera dificultad, construyendo juntos o reconstruyendo la vida en rosa a nuestro alrededor.

8 comentarios

David -

Al leer el texto pensé que era una defensa de la pareja. La lucha por la estabilidad en los malos momentos. El amor. Pero al ver los comentarios creo que estoy en la web de la revista Consumer de Eroski :) jaja.
en serio, me gusta el texto y estoy de acuerdo. Si encuentras a una persona con muchas cosas buenas, no la pierdas. Es posible que las cosas malas las vayan a tener también todo/as los que vengan después.

Laura -

Y no os ha pasado nunca que se ha bloqueado algún programa del ordenador o alguna web y al final lo dejáis por imposible. Y cuando volvéis, ahí está, funcionando otra vez como si nada!!
Creo que en algunas relaciones puede pasar algo parecido. Por mucho que uno intente arreglarlas, se siguen atascando por algún motivo...
A veces un poco de tiempo y tierra de por medio no están de más.

Tali -

Os recomiendo este documental de TVE
http://www.rtve.es/noticias/20110104/productos-consumo-duran-cada-vez-menos/392498.shtml

Inés -

¿Realmente la intención de este texto era cuestionarnos cuál es el mejor sistema reproductor de vídeo? Qué boba, y yo pensando que estábamos hablando de lo insatisfechos que nos sentimos casi siempre...

bea moreno -

Yo también soy fan del blueray...
estoy totalmente de acuerdo con Ele en que "Ya no nos esforzamos por mantenerlas, por cuidarlas, por arreglarlas cuando se estropean. Esto falla, ya no me sirve, algo mejor vendrá".
Hay que ver qué tipo de avería tiene, hay algunas que son fáciles de resolver y de manual, y hay otras que no hay por dónde cogerlas y es mejor tirar el aparato (o reciclarlo) y comprar otro. Pero que sea nuevo no te asegure que sea mejor, sólo que vendrá más nuevo, limpito y sin arañazos. Pero puede tener un problema de fábrica horrible y no te dura lo que la lavadora de Cuéntame que has estado con ella 10 años y tan mal no te iba.

En fin, el que no se compra un Kinetic es porque no quiere...

Alf -

Se me olvidaba! Para evitar que se nos vuelva a estropear el DVD si decidimos arreglarlo... (cualquiera se resiste a sustituirlo por un flamante blueray) hay dos claves que tenemos que seguir:

1. Limpiarle la lente de vez en cuando para que no note el paso del tiempo. Es decir, cuidarlo más aún que antes
2. No pedirle que funcione como nuevo ni de forma parecida. Es normal que una vez arreglado se atranque de vez en cuando, salte pistas, no reproduzca todos los DVD, etc...

Yo personalmente prefiero comprarme un Blueray, disfrutar de la alta definición y quitarme de problemas futuros con el DVD, a ver si un día voy a querer ver la edición remasterizada del mago de Oz y no me va a dejar hacerlo

Alf -

Ele! Creo que en este caso tenemos mucho que aprender de la electrónica de consumo... (por cierto se lee entrelineas ciertos apuros al manejar tu nuevo móvil en este post?)

Te cuento, todos tendemos por naturaleza a que cuando nos cambian la tele, el ordenador, el Windows, o el aparato que sea a desvirtuar la novedad y enaltecer lo antiguo. Da igual que el nuevo sistema sea mas rápido, estable y bonito, tendemos a ver lo antiguo mejor porque con ello hacíamos tal cosa o tal otra...

Sin embargo el nuevo hará posiblemente lo mismo de manera mas eficiente y además muchas otras cosas que el anterior no hacía. Aplicado a las parejas siempre hay que creer ir a mejor no? Porque al viejo algo le pasaba.

Si tu nuevo televisor no hace lo mismo que el anterior y encima con mas nitidez y con pantalla plana, es que te han timado querida, tendrás que volver a la tienda.

En cuanto algo se estropea es mejor no arreglarlo e ir a por uno nuevo con mayores prestaciones ya que siempre siempre tendrá mejores prestaciones. Si encima lleva tiempo renqueando ya es el colmo... Para que vas a aguantar que la pantalla de tu telefono se apague a cada minuto si hay otro con pantalla superamoled con una megacamara e internet esperandote? Si decides arreglarlo tarde o temprano acabará volviendo a fastidiarse. Pero no hay problema! Será por la variedad de teléfonos en el mercado....

En definitiva, que cuando algo falla podemos intentar arreglarlo por eso del cariño y tal (sí, yo tengo cariño a algunos aparatos), pero cuando se estropea es mejor ir a la tienda y sustituirlo, así nos evitamos problemas futuros porque volverá a estropearse

Juanete -

Ele, no puedes dejar el blog... He empezado a leer tu última entrada y aquí sigo, a las dos y media de la mañana cotilleando otras historias tuyas... Hoy necesitaba leerte más que nunca. TQ